El Congreso de Brasil analiza una ley que podría aliviar la presión financiera de la petrolera estatal Petrobras y que permitiría un incremento en la inversión extranjera y privada en el offshore brasileño.
Según detalló el Senador José Serra, quien presentó el proyecto de ley, los cambios eliminarían la obligación de Petrobras de ser la única operadora en los yacimientos del presal. Esto estimularía un mayor flujo de inversión en una de las áreas más importantes de la exploración petrolera a nivel mundial, señaló El Cronista.
Durante una entrevista con el Financial Times, Serra aseguró que “este proyecto de ley, una vez aprobado, mejorará el rendimiento financiero de Petrobras”, además de acelerar el desarrollo de los campos del presal, que llevan años estancados.
El proyecto de ley ha captado adeptos en los últimos días, entre ellos el líder del Senado, Renan Calheiros, miembro del partido que domina en ambas cámaras. Si bien Eurasia Group señaló en una nota que la Presidenta Dilma Rousseff se opone a la medida, aseguran que tiene una capacidad limitada como para vetar el proyecto. Se estima que podría aprobarse en el mes de septiembre.
El yacimiento Pre-Sal fue descubierto en 2007, y se cree que posee al menos tanto crudo como el Mar del Norte, que alcanza casi los 60.000 millones de barriles de crudo. Entonces, el gobierno de Brasil decidió modificar las leyes del país para que Petrobras sea el único operador de los descubrimientos de esa área.
Entre otras cosas, esa ley estipula que la petrolera estatal debe tener al menos una participación del 30 por ciento en cada uno de los campos.
Ante la crisis generada por el escándalo de corrupción, Petrobras anunció una pérdida de 51.000 millones de reales en 2014 y confirmó la semana pasada que iba a reducir un 37 por ciento su plan quinquenal de inversión a 130.300 millones de dólares, que incluye la venta de la totalidad de sus activos en Argentina.
El fundador del Centro Brasileño de Infraestructura, Adriano Pires, aseguró que el proyecto de ley presentado por Serra aceleraría el desarrollo de los campos del presal y le permitirían al gobierno realizar subastas reales de los bloques de exploración para atraer mayor inversión, ya que la única licitación que se realizó hasta el momento del yacimiento tuvo sólo un postor, un consorcio liderado por Petrobras.